Cartas a Michael

Carta a un Michael

Apreciado señor mayor: decía un gran critico de cine venido a horas bajas, que segundas partes nunca fuero buenas y hay cosas en la vida que se asemejan mucha al cine y la F1 parece ser una de ellas. Me imagino que con la que está cayendo, mejor dicho con la que te está cayendo, tú serás el primero en reconocerlo y pensaras en que puñetero cable se te cruzo en ese germano cerebro que tienes para dejar la paz de esas praderas de suiza donde pastan tus vacas junto a esa casita  de tropecientos mil metros cuadrados al ladito del lago.

La verdad es que te comprendo, seguro te sentiste como esos abuelillos que se aburren sin hacer nada y seguro que una noche, escuchando la canción de Gardel te entro la melancolía de aquellos maravillosos años donde todo era champang y triunfos, donde tu amigo Ross the Boss te hacia esos pepinos impresionantes y siempre había un mindundi a tu lado como compi que facilitaba la tarea y si no, se encargaba papa Todt para meterlo en el corral. “Oh, que bonitos años”, pensaste.

 Claro, así vistes el cielo abierto cuando un día Ross te dio la oportunidad de volver y imaginases que el camino iba a ser de rosas para ti, pero te salieron piedras por el camino. Ya no estaba papa en el equipo, se ha buscado otras diversiones, Ross ya no que mima como antes y los coches no te lo hacen a medida ya que el te tomaba las medidas se quedo en Ferrari y tampoco este año el coche era el pepino que indultaron vergonzosamente los de la ma-FIA el año anterior. El mindundi de al lado no lo era tanto y te esta dando un repaso de  antología. Y claro tú dirás que si el coche no es patatín, que si las ruedas patatán, que si, que si. Lo cierto es que el Príncipe de Bequelar te da una y otra vez por la retaguardia y te lo está dejando como una bandera de Japón, y claro luego pasa lo que pasa, que lo pagamos con los demás.

Señor mayor, no queda fino hacerle esas cosan a tus antiguo compañero, es de muuuuy mala persona, y encima vas de corderito al que van a degollar al matadero diciendo que no habías echo nada malo. No seas abuelito malo que después tendrás que pasar por el purgatorio media eternidad. Lastima que la ma-FIA no te expulse de la competición y así evitar maniobras de ese tipo, pero cuando eres blando, sobretodo con quien te interesa, mal ejemplo das y tarde o temprano producirá una desgracia y todos a llorar, o no, y para la próxima vez será sancionado, ¿comprendes?. Pero no te preocupes que ya has dejado escuela y te salen algún que otro  alumno aventajado.

Seguramente te estarás replanteando dejarlo al final del año y no seguir más, y harías bien, pero creo que mas de uno te esta preparando una patada en las posaderas para allanarte el camino. Si por mi fuera te metería en una caja envuelto en papel celofán y con unas bolas de naftalina y te mandaría en tu jet privado a una isla de donde no te pudieras salir y mandaría algunos abuelitos, de esos que se aburren y que te enseñaran a jugar a la petanca, que por lo visto debe de ser muy divertidos, y sobre todo menos peligroso.